En esta sección compartiremos herramientas sencillas para comunicarnos de forma asertiva.
Hay algunas pautas sencillas que puedes seguir, recuerda que ésta no es una habilidad que se gane de forma sencilla, se necesita mucha práctica.
A continuación, algunos ejemplos de Comunicación Asertiva:
- Eso que hiciste/dijiste me hizo sentir de tal manera.
Aquí no damos la responsabilidad a la otra persona, asumo que su acción/palabra tuvo un efecto en mí, efecto que me corresponde, no juzgo las acciones ni les asigno adjetivos.
- Necesito que en el futuro hagas/no hagas/procures.
Buscamos cuáles son nuestras necesidades no atendidas, las cosas que necesito que sucedan para que el malestar no vuelva.
- Si no puedes hacerlo, lo que va a pasar es que yo…
Explica qué consecuencias tendrá que la conducta se repita.
Escucha activa.
Para comunicarnos es primordial saber escuchar, a veces no logramos comprender a cabalidad lo que la otra persona nos quiere decir o hay huecos de información que llenamos automáticamente asumiendo cosas. Es importante no asumir o dar por hecho, es mejor preguntar, tener la información completa y responder con eso en mente.
- Reflejo del contenido.
Resumir el contenido principal de lo expresado por la otra persona devolviendo lo que aprendí de su comunicación y señalar elementos significativos invita a continuar la comunicación y ahondar en más detalles.
Por lo que me cuentas, entiendo que lo que pasó fue esto y luego esto
Comprendo que entonces pasó tal cosa que desencadenó en tal otra cosa
- Reflejo de sentimientos.
Incentiva que se tome conciencia de los sentimientos, actitudes o intenciones implícitos en lo que la persona comunica para ampliar el sentido emocional de la situación, facilitando el propio cuestionamiento frente a cómo se siente con lo ocurrido.
Cuando te escucho me imagino que te sientes de tal manera, ¿es así?
Imagino que eso te hizo sentir tal, ¿estoy en lo correcto?
Un reflejo siempre es una percepción propia que necesita de confirmación, siempre es una pregunta, nunca es una imposición.
Crianza respetuosa.
Ante un desborde o lo que les adultes consideramos una conducta inadecuada hay varias claves para entender: no puedo obligar o forzar una reacción en la otra persona, no puedo obligarle a hacer o decir lo que yo quiero que diga o haga.
Tenemos varios pasos a seguir ante una conducta inadecuada.
- Identificar qué es lo que detona en mí, por qué esta conducta me está afectando de esta manera. Evaluar si realmente es la conducta en sí o mi historia la que causa esa reacción.
- Validar las emociones que experimenta la otra persona, “entiendo que estés enojade porque pasó tal cosa y tu querías hacer tal otra cosa”
- Proponer acompañamiento a la emoción, “podemos hablar, puedo dejarte a solas un momento, puedo abrazarte”
- Ofrecer opciones “para que esto no pase de nuevo, podemos hacer tal cosa o tal cosa o tal cosa, ¿qué prefieres?”
Esta estrategia funciona con niñes y con adultes, en ambos casos hay que tener claros nuestros límites, en donde trazamos la línea que nos hace abandonar la conversación y poner distancia o una barrera física.