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Seguridad

Si aún te sientes en peligro y la persona agresora continúa siendo una amenaza para ti, es preciso que crees un protocolo de seguridad personal, para lo que necesitas:

Mapear amenazas y puntos de riesgo

Piensa en tu rutina diaria, los trayectos que recorres y los lugares en donde realizas actividades.

Identifica los puntos geográficos y los momentos del día en los que te sientes en mayor riesgo: el trayecto del metro a tu casa, el transbordo entre el metro y el autobús, la escuela, etcétera.

Mapea personas de confianza, establece consignas y rutas críticas.

Mapea personas de confianza

Piensa en todas las personas de tu entorno que están dispuestas a apoyarte en estos momentos divídelas en grupos:

  1. Monitoreo primario

Esta persona tiene que estar disponible para monitorear tus trayectos y tu seguridad. Tiene que ser alguien de toda tu confianza.

Puedes establecer consignas como:

-Enviar un mensaje cada día a las 10pm una vez que esté en casa o en un lugar seguro del que ya no vaya a salir.

-Llamar una vez que haya llegado a la escuela para avisar que no sucedió nada en el trayecto.

-Avisar cada vez que salgo de la ciudad, cuando me voy y cuando vuelvo a un lugar seguro.

Cuando esa consigna no se cumpla, la persona que monitorea acudirá a tu contacto de emergencia para activar la ruta de emergencia definida por ti.

Recuerda que el compromiso es mutuo y te tienes que comprometer a cumplir las consignas que estableciste.

La persona que te monitorea y tu contacto de emergencia pueden ser la misma persona.

  1. Monitoreo periférico

Estas pueden ser personas de tu entorno a las que quizá no conozcas demasiado y no tengan toda tu confianza, pero sí la suficiente como para informarles que estás atravesando un proceso de violencia y temes por tu seguridad.

La consigna es que te avisen si ven movimientos extraños, si alguien pregunta por ti y que funcionen como tus testigos en caso de algún incidente.

Tienen que ser personas de tu entorno cercano: una vecina, la señora de la tienda, el vigilante que está en la puerta de tu escuela o trabajo, etcétera.

No les tienes que compartir todos los detalles de tu situación, simplemente informar que te sientes en peligro y agradecerías su cuidado y que te informaran de cualquier movimiento extraño.

  1. Contacto de emergencia

Esta persona será la encargada de activar una ruta de emergencia definida por ti en caso de que algo suceda.

Debe tener información completa sobre la situación en la que se encuentra tu proceso legal, en caso de existir, tu domicilio, contacto con familiares, abogada, otres amigues, colectivas que puedan apoyar tu caso si llega a ser necesario hacer presión mediática y ante las autoridades.

Esta persona puede ayudarte a mantener un registro de la documentación del caso de violencia.

Es preferible que esta persona no viva a más de 5km de ti, para que sea posible, en caso necesario, que acuda a tu domicilio en poco tiempo para verificar tu bienestar.

El compromiso es mutuo, no puedes ocultar información. 

Recuerda que en caso de una emergencia mientras más información clara tenga tu contacto de emergencia, será mejor.

  1. Apoyo emocional

Piensa en personas que están ahí para escucharte cuando tienes miedo, angustia, tristeza.

Acude a grupos de amigas, grupos establecidos para apoyo a víctimas de violencia o inclusive a tu terapeuta. En nuestro directorio puedes encontrar información de terapeutas y grupos disponibles.

Mapea contactos de emergencia en caso de que algo suceda

Es importante que tengas claro a dónde acudir en cada situación, mapea un hospital, contacto de una abogada, psicóloga, familiar responsable de ti en caso de que sea necesario, agrupaciones feministas de apoyo a personas en situación de violencia, etcétera.

Toda esta información tiene que estar actualizada y disponible para ti y para tu/s contacto/s de emergencia.

Establece una ruta de acción de emergencia.

Siempre esperamos que las cosas vayan bien, pero tienes qué pensar cómo va a reaccionar la gente que te acompaña en esta situación si las cosas salen mal.

Define:

Si una de las consignas de monitoreo no se cumple, ¿cuánto tiempo se da de tolerancia?,

¿qué se hace pasado ese tiempo? Por ejemplo: contactamos a tu abogada, a tu familia, acudimos directamente a levantar un acta.

Recuerda que tú tienes el control de las consignas, monitoreo y acción de emergencia y que al involucrar a personas que están preocupadas por ti tienes la responsabilidad de cuidarles también.

No se trata de que sientas paranoia y vigilancia, establece escenarios que te hagan sentir seguridad y compañía en el día a día. El mejor protocolo de seguridad es el que se cumple y nos da oportunidad de llevar una vida tranquila, no el que nos añade angustia en el cotidiano.

Documenta:

Si las agresiones y/o amenazas continúan, documenta todo o pide ayuda a tus amigues para documentar, registra hechos, hora, lugar, si llamaste a la policía, si levantaste un acta, si solicitaste medidas de protección, informaste a una tercera persona de la situación, si hay testigos de los hechos y su contacto.

Descarga:

Aquí abajo puedes descargar un archivo con el que puedes crear un protocolo de seguridad personal, recuerda mantener este archivo, ya sea físico o digital, en un lugar seguro.